Y en los mismos hábitats ramilletes de otras especies como Gymnopus fusipes.
O también las más comunes Hypholoma fasiculare.
Alguna especie también se observan en los caminos alimentadas de la humedad del rocío o de alguna escorrentía, entre ellas la Aleuria aurantia, con claros signos de desecación.
Y en mejor estado el Abortiporus biennis de textura muy coriácea.
Sorprendentemente encontramos Boletáceas, los conocidos popularmente, en algunas parte de Navarra, como “hongos”, Boletus reticulatus, (hongo de verano casi en noviembre) y también sus afines, B. aereus y B. edulis.
También encontramos algunos ejemplares de los hongos rojos, de fructificación más tardía y por tanto más propios de estas fechas, Suillellus rhodoxanthus, en lamentables estados.
Y por supuesto los numerosos hongos de madera, sobre todo representantes de los Ascomicetos estromáticos como Diatrype stigma.
De los Afiloforales, como Trametes pubescens.
Y también de los Agaricales, como Pluteus cervinus.
Pues la seta estrella diría Armillaria mellea, las hay a millares. Gracias por la serie Luis Miguel
ResponderEliminarPerdón, olvidé decir quién soy.
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