Como es típico los grupos más tempraneros son las Russuláceas y Amanitáceas, entre los primeros , gibelurdiñes en general, la Russula nigricans, rúsusla ennegrecida o Gibelilun orrizabal, de láminas muy gruesas y espaciadas, menos de 6 en un cm del borde.
Más interesante gastronómicamente el verdadero gibelurdiñ, aunque en la variedad verdosa, Russula cyanoxanta var peltereaui, de láminas muy blancas, suaves y flexibles al tacto.
Entre las amanitas, además de la enrojeciente, varios ejemplares muy bonitos de Amanita vaginata, que presenta una gran volva membranosa y carece de anillo en el pie.
Pocas veces falta en los hayedos el Hymenopellis radicata = Oudemansiella radicata, que como su propio nombre indica el pie se prolonga en la tierra en una larga raíz, de escaso interés culinario por su poca carnosidad.
Algunas especies curiosas y también comestible, la Helvella crispa, oreja de gato o silla de montar.
Y la estrella de tierra higrométrica, Astraeus hygrometricus, cuya envoltura en forma de estrella se abre con la humedad y se cierra al desecarse.
Sobre ramas en descomposición de hayas en el suelo destaca por su colorido, a pesar de su escaso tamaño el Marasmius rotula, o marasmio ruedecita, cuyos sombreros parecen diminutos paracaídas.
Y por último terminaremos este recorrido micológico con el gran regalo del día una buena producción de Pleurotus pulmonarius o seta de tocones.
Relación de especies observadas
Amanita ceciliae,
Amanita rubescens, Amanita vaginata, Astraeus hygrometricus, Biscogniauxia
nummularia, Boletus edulis, Chlorociboria aeruginascens, Gymnopus dryophilus,
Helvella crispa, Hymenopellis radicata, Lentinus brumalis, Marasmius rotula,
Megacollybia platyphylla, Mycena renati, Phallus impudicus, Pleurotus
pulmonarius, Russula cyanoxantha f_peltereaui, Russula nigricans, Russula
risigallina, Stereum insignitum, Suillellus queletii,