Con la extrema sequía que padecemos hasta ahora es momento de dedicarnos a mirar los hongos de algunos ambientes que normalmente no hacemos caso y que nos pueden sorprender, es el caso de los excrementos de caballos o vacas y las ramas, troncos o tocones de los árboles donde se conserva un mayor grado de humedad.
Si miramos con detalle algunos excrementos podremos observar un buen número de especies de hongos coprófilos, aquí vemos dos diferentes, unos discos amarillos y otros marrones.Los discos amarillos corresponden a la Cheilymenia stercorea que presenta en el bordes como unas pestañas si las observamos con una lupa.
Las pestañas del borde si las vemos con los más bajos aumentos del microscopio nos impresionan su morfología, autenticas espinas.
Y en su base otras espinas estrelladas sorprendentes.
Toda la superficie amarilla la forman las ascas y los parafisos que contienen el pigmento amarillo que da color a la seta.Entremezcladas con las anteriores y pasan desapercibidas por su coloración pequeños discos de Ascobolus furfuraceus.
Si en la anterior especie sosprenden las pestañas del borde, en este caso las inconfundibles y singulares esporas que desarrollan dentro de las ascas, púrpuras en la madurez y marcadas de estrías longitudinales.
Y por supuestos además de Ascomicetos lo que no faltan nunca son los coprinos, los hongos delicuescentes, una gran diversidad de ellos, aquí el Coprinopsis radiata.Las ramas y troncos son el ambiente idónea de numerosos Ascomicetos Pirenomicetos que forman costras negras en cuyo interior se forman las esporas, Hypoxylon fuscum.
Las costras más o menos circulares de Biscogniausia nummularia.
Y entre otras las costras más extendidas de Diatrype stigma.
Sobre ramitas semienterradas las diminutasfructificaciones que parecen paracaídas de Marasmius rotula.
Y por supuesto una gran variedad de Afiloforales, "yesqueros", entre los que destacan el Stereum insignitum.
El Stereum hirsutum, como su nombre indica muy pelosos o hirsuto.
Y ejemplares muy viejos, del año pasado de Lenzites betulina, completamente cubiertos de algas verdes que enmascaran su colorido original.