Sobre ramas, troncos o tocones de diferentes especies arbóreas, especialmente de caducifolios, desarrollan un grupo de setas gelatinosas con aspecto de tripa o disco, muy llamativas sobre todo en tiempo húmedo y que pertenecen a géneros como Tremella o Exidia, entre otros, aunque su aspecto no las haga atractivas en realidad son comestibles.
Una de las setas más comunes en cualquier momento del año, la Tremella mesenterica, es una seta muy gelatinosa con aspecto de cerebro o tripa muy blanda, amarillo vivo que desarrolla sobre ramas o troncos de cualquier tipo de árbol, especialmente de Quercus. Aunque se puede considerar comestible no se suele consumir por su aspecto y textura.
Morfológica indistinguible la Tremella aurantia, también es una seta muy gelatinosa con aspecto de cerebro o tripa muy blanda, amarilla o blanquecina pero que desarrolla sobre fructificaciones de Stereum hirsutum en ramas o troncos de cualquier tipo de árbol, especialmente de Quercus.
La Tremella foliacea, presenta el mismo aspecto de cerebro o de tripa muy blanda, pero de coloración marrón que desarrolla sobre ramas o troncos de árboles caducifolios. Produce las esporas en basidios tabicados transversalmente, son muy características, curvadas en forma de salchicha.
La Tremella globispora es mucho más diminuta, globulosa o discoide, gelatinosa y aspecto cristalino que desarrolla sobre estromas de Ascomicetos.La más raras de la tremelas es la Tremella albida que como su nombre indica tiene forma de tripa de cristalina o blanca desde joven.
Muy similar macroscópicamente pero con esporas en forma de salchicha en vez de globosas como la Tremella, la Exidia glandulosa es un hongo sin interés comestible dado su tamaño y consistencia gelatinosa, característica por su morfología en forma de almohadilla gelatinosa marrón extendida sobre las ramas.
La Exidia thuretiana, tiene más bien forma de almohadillas aplastadas, blancas y cristalinas, de consistencia gelatinoso dura y superficie marcada con pliegues irregulares, sin ningún interés culinario.
La Exidia truncata desarrolla sobre ramas o troncos, con forma de discos o almohadillas aplanadas o a veces deformadas por fusión de unos con otros, negra y de textura gelatinosa y por tanto sin interés culinario.